No soy mi cuerpo, soy más mi alma…
la que habla con las paredes…
y se viste de carne para entregarse al mundo.
Soy más mi alma…
hablando con el lenguaje de mi cuerpo,
que arde y padece clamando de sed por los amantes,
que por los poros se sumergen en el ser,
hasta llegar a su alma…
que corre libre, que vuela con desearlo,
que respira por simple placer de los olores.
Soy ese alma enjaulada de sufre por libertad,
pero si es liberada no sabría porque luchar,
y se desnuda frente al espejo, y se admira los defectos,
que la vuelven parte de este mundo imperfecto,
son su camuflaje y su forma de andar,
su instrumento de expresión, y la voz con la que grita.
Y finge ser cuerpo, para ser lengua por el sencillo placer del gusto…
que la deja curiosear entre sabores, entre placeres, entres sabores y placer, entre placeres y sabores.
Pero soy más mi alma, con estuche autentico de beldad y fealdad,
de esa imperfección perfecta que en el claro oscuro se vuelve intensidad y firmeza,
el carácter y la destreza,
de quien finge ser mujer cuando es etérea , asustadiza y sumisa
entre las pieles de un cuerpo que se mezcla en multitud para evitar la vigía...
JHANOA
